A un mes de que entró en funciones el nuevo poder judicial que encabeza la presidenta magistrada, Erika Torres pretende acabar con la duplicidad de funciones y gente que cobra sin trabajar.
Es importante destacar que hasta el momento han despedido a cerca de 20 trabajadores de la anterior administración del poder judicial.
Lo que significa que la barredora en el poder judicial es implacable contra gente que por muchos meses sin llevar al cabo funciones especiales, cobraban tremendos sueldos y prestaciones de fantasía.
Es importante precisar que el poder judicial era dominado al cien por ciento por el exmandatario estatal, Mauricio Vila Dosal, pero con la reforma del poder judicial se acabó la pista de aterrizaje de muchos panistas.
Por lo pronto, la nueva presidenta magistrada pretende con estas acciones importantes ahorros y acabar con las viejas prácticas del anterior gobierno que estaba infestado de gente acostumbrada sin vergüenza alguna a cobrar sin trabajar.
